Desde 2006 hasta la pandemia, Alemania fue la locomotora de Europa. Tras la Gran Crisis Financiera, su economía superó al resto de la eurozona, al igual que su mercado bursátil. Sin embargo, desde 2020, Alemania se ha convertido en un país rezagado, con un Producto Interior Bruto (PIB) que ha avanzado un 5% menos que el de la eurozona (el PIB alemán apenas ha igualado su nivel pre-covid). Si la locomotora se desenganchó en su día del resto del bloque por su poderío, ahora amenaza con hacerlo como vagón de cola.
Puede seguir leyendo la noticia en el siguiente link
Noticia propuesta por FUNDIGEX – Asociación Española de Exportadores de Fundición